Economía, vacunas, pobreza, migraciones, movimientos sociales, bioeconomía y democracia encabezan el ranking de los retos para este año, tras el rebote de la actividad económica en gran parte de los países de la región en 2021. Las proyecciones para este año lucen más desafiantes.
Problemas y desafíos existen de sobra en una región en la que más de 650 millones de personas conviven en 35 territorios con marcada desigualdad en múltiples niveles. Los líderes y los expertos en entorno social, político, económico y ambiental del Observatorio de Tendencias SURA, sin embargo, no tienen dudas en definir cuáles serán los principales retos para 2022 en América Latina:
Desde lo económico
Desde lo político
Desde lo social
Así lo confirman los expertos del Observatorio del entorno latinoamericano de SURA, un grupo de especialistas en economía, política y ciencias sociales atentos a las transformaciones de la región que se apalancan de una plataforma de observación propia que revela en tiempo real más de 15 mil señales globales identificadas por casi 1200 observadores activos en 9 países de América Laina.
Por su parte, los principales analistas políticos de la región hablan de la necesidad imperiosa de consolidar la democracia, en medio de una creciente incertidumbre del electorado, que en los últimos meses ha demostrado un cambio de inclinación política en gran parte de los países. A continuación, un repaso de los principales retos de 2022 para América Latina, según han destacado organizaciones expertos y el Observatorio SURA para Asegúrate de Vivir.
Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), América Latina bajará su ritmo en general de crecimiento a 2.1% en 2022, luego de haber alcanzado un promedio de 6.2% el año pasado. Advierte que la desaceleración ocurre en medio de las grandes disparidades que hay en las capacidades de los países desarrollados, emergentes y en desarrollo para implementar políticas fiscales, sociales, monetarias, de salud y de vacunación.
Se estima que Brasil, la economía más grande, será la que menos crezca, con apenas un 0.5%. México por su parte avanzará 2.9%, Colombia 3.7% y Chile 1.9%. Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la CEPAL, señala que en un escenario como el que plantea el 2022, es crucial la creatividad “para poder articular políticas fiscales y monetarias con mayor coordinación y con una mirada de mediano plazo”.
La pandemia ha cobrado más de 1.5 millones de vidas en América Latina y el Caribe, y ha dado lugar a más de 45.7 millones de casos confirmados desde su aparición en la región en febrero 2020. La región acumula cerca de un quinto de los casos confirmados de Covid-19 y alrededor del 30% de las muertes en todo el mundo, a pesar de constituir sólo el 8.4% de la población mundial.
Al cierre de 2021, el 57% de las personas de Latinoamérica y el Caribe estaban completamente vacunadas; es decir, con aplicación de dos dosis. Aún así, en 20 de los 35 territorios de las Américas aún tienen que alcanzar el objetivo de la Organización Mundial de la Salud de lograr un nivel de vacunación del 40% para fines de 2021. Y con las nuevas variantes y el aumento de la necesidad de vacunas de refuerzo adicionales, los desafíos de vacunación continuarán en 2022.
Un informe de la Unesco señalaba en 2021 que mientras una de cada cuatro personas en los países de altos ingresos había recibido una dosis de la vacuna, en los de bajos ingresos la proporción era de una cada 350 personas. Y eso fue por varios motivos: una gran carga en los sistemas de salud, que ya estaban debilitados por atender otras enfermedades endémicas; las limitaciones en la producción global de vacunas; y las diferencias en las capacidades de negociación. En ese sentido, se estima que los 27 países y territorios más ricos del mundo, que abarcan solo el 10% de la población mundial, han administrado el 32% de las dosis disponibles en el mundo”.
Más allá del enorme desafío de recursos y logístico para administrar las vacunas, la región busca asentar las bases para su desarrollo y la fabricación. Un artículo de Oceano Medicina, explica que algunos proyectos de inmunización “han avanzado, mientras que otros se han detenido o se ha dilatado su desarrollo debido, principalmente, a la falta de financiamiento”.
La revista explica que Argentina avanza en 6 proyectos de vacunas que, actualmente, se encuentran en fase preclínica de investigación; en Colombia, se está trabajando en la propuesta de fabricación de una vacuna de origen nacional; y, en Brasil, se mantiene el financiamiento a nueve proyectos de vacunas anti-Covid-19. A su turno, en México, la iniciativa Livion.vac espera obtener el financiamiento necesario para poder iniciar las pruebas en humanos y la vacuna chilena ya está aprobada en su primera fase de ensayos, completa la publicación científica.
La economía en desaceleración y la pandemia no hizo más que empeorar las condiciones de pobreza de millones de personas en la región más desigual del mundo, según Naciones Unidas. Para Bárcena, de la CEPAL, los mercados laborales no se han recuperado del golpe que les asestó la emergencia sanitaria: “La pandemia tuvo una afectación muy fuerte que fue la informalidad, que se espera que aumente con efectos sociales devastadores”, explica. El efecto es aún peor para las mujeres y las minorías.
Las cifras del organismo son contundentes: el total de personas pobres ascendió a 209 millones a finales de 2020, unas 22 millones de personas más que el año anterior. Se trata de un aumento en los niveles de pobreza sin precedentes en las últimas décadas e impacta fuertemente en la desigualdad y el empleo. Por este motivo, la Organización Panamericana de la Salud insta a los gobiernos de la región a acelerar los procesos de vacunación, transformar los sistemas de salud, fortalecer la inversión pública y consolidar Estados de bienestar, entre otras medidas, para controlar la crisis sanitaria en el corto plazo.
“Este año parece ser desafiante para la región. Ya diversos estudios pronostican un proceso de erosión democrática, acompañado de mayores restricciones a las libertades individuales y amenazas a los derechos humanos”, advierte Clarisa Demattei, Investigadora del Centro de Estudios Internacionales, de la Universidad Católica Argentina. El informe anual de Human Rights Watch proyecta para 2022 más “limitación de derechos civiles básicos como la libertad de expresión y de prensa y la falta de independencia del Poder Judicial”. Incluso advierte por la violación sistemática a los derechos humanos en países como Venezuela y Nicaragua.
Para Michael Shifter, Presidente del Diálogo Interamericano (Inter-American Dialogue), estos años se caracterizan por una sóla palabra: ‘incertidumbre’. “Nadie sabe lo que ocurrirá en muchos países. Es un momento de cambio que se ha demostrado en muchas elecciones, hay alternancia en el poder y se crean así expectativas y demandas. Los gobiernos tienen problemas al momento de responder a las expectativas de la gente. Esto genera incertidumbre respecto a lo que pueda pasar y cómo reacciona la gente. Mirando hacia el futuro, la región está marcada con incertidumbre y la severa crisis económica que enfrenta”, opina Shifter.
Los retos en la región están a la orden del día: no son los únicos y no serán resueltos en los meses que quedan de 2022. Pero reconocerlos, dicen los analistas, es el primer paso para solucionarlos.
