Toda crisis está acompañada de cambios. Sin lugar a dudas, el 2020 será un año que recordaremos con grandes aprendizajes y retos para afrontar de una nueva manera lo que conocíamos antes como cotidiano. Frente a esto, las empresas tienen un gran reto: transformarse con lo aprendido durante la época del virus.
Diferentes empresas han comenzado a tomar medidas para concentrar esfuerzos en fortalecer las nuevas estrategias laborales como el trabajo remoto o teletrabajo. Uno de ellos es Andrés González, exgerente de Zara en Londres y actual jefe nacional para un grupo empresarial colombiano. Su experiencia le ha permitido ver las nuevas posibilidades que tienen las empresas y la economía con los cambios generados por el COVID-19. Estas son algunas de las apreciaciones de González frente al reto y oportunidad que trae el teletrabajo para nuestra economía a corto plazo.
Educación virtual. Las universidades e instituciones educativas han transformado su modalidad presencial y han logrado llevar sus contenidos a la virtualidad. Aunque esta posibilidad ya existía y era usada en algunas asignaturas, el futuro de la educación por fin ve en lo virtual una posibilidad para llegar a más personas de forma más cómoda, sin la necesidad de desplazamiento hasta una sede física y con facilidades similares en términos de interacción entre estudiantes y profesores. Un nicho nuevo para las universidades que diversificarán sus ofertas y crearán nuevos empleos bajo la modalidad del teletrabajo.
Deporte en casa. El cierre de todas las sedes deportivas llevó a diferentes empresas a crear contenidos audiovisuales que atendieran las necesidades de sus clientes. Ahora y luego de este periodo, los entrenadores no tendrán que estar siempre en una sede física para dar una clase: una pantalla gigante, un bueno sonido y la posibilidad de interacción en directo se perfilan como la nueva manera de orientar algunas clases deportivas sin la presencia física de un entrenador.
Medicina virtual. La alta demanda de atención en centros médicos ha generado que muchos hospitales y empresas de salud atiendan citas de manera telefónica y por videollamada. Los casos elegidos para esta modalidad son los de seguimientos a enfermedades crónicas y consultas preventivas. La medicina y algunos médicos seguirán con esta metodología para priorizar la atención física de pacientes que necesiten asistencia vital.
Reuniones virtuales. Adecuar espacios de reunión en una sede física dará paso a la instalación de un buen sistema de comunicación en los hogares de algunos colaboradores de nuestras empresas. De esta manera, sin congestionar las vías o los parqueaderos de las sedes empresariales y ahorrando en adecuación de nuevos puestos de trabajo, las juntas o reuniones serán a distancia, con herramientas tecnológicas que permiten compartir pantallas, enviar archivos, editar textos en línea y grabar la sesión en caso de la ausencia de alguien del equipo. Este es un nuevo nicho para las empresas dedicadas al soporte tecnológico.
Cambio de menú en los restaurantes. El uso de domicilios ya estaba arraigado en nuestra cultura. Sin embargo, el periodo de aislamiento facilitó el surgimiento de un nuevo negocio: entrega de insumos que el cliente debe preparar para obtener el producto final. Aunque la atención al cliente continuará, la experiencia de cocinar en casa con insumos casi listos y enviados por un proveedor conocido es una nueva posibilidad que abre un nicho poco explorado.
Comercio y facturación electrónica. La necesidad de realizar pagos sin hacer contacto con el dinero o con los domiciliarios ha llevado a empresas pequeñas al cobro electrónico. Aunque hace mucho tiempo este tipo de pagos se lleva a cabo, las pequeñas y medianas empresas han encontrado en esta modalidad posibilidades para transformar sus servicios. Según González, esto también aplicará para temas administrativos como legalizaciones, órdenes de compra a proveedores, archivos físicos, papelería innecesaria y conciliaciones que deberán adaptarse a metodologías de teletrabajo.
Una vez superada la emergencia, Andrés González cree que la sociedad priorizará más su permanencia en los hogares, el consumo de productos para el cuidado de la salud, usará más el delivery y pagará por entretenimiento y educación desde sus hogares. Adicionalmente, temas como el mejoramiento de la movilidad en las ciudades, las condiciones favorables para el aire, el surgimiento de nuevas aplicaciones y los nichos de negocios emergentes serán producto del cambio que generó el COVID-19 y que líderes empresariales como González ven con buenos ojos.