La vida laboral ha sufrido transformaciones significativas a raíz de las medidas de confinamiento impuestas en la mayoría de países, lo que ha dado pie a nuevas estrategias de producción y organización en las empresas. Te contamos algunas.
La desaceleración de la productividad por cuenta de la propagación del COVID-19 es un fenómeno que ha motivado a muchos empresarios a buscar alternativas para mantener activos sus negocios. Tanto las grandes firmas como los pequeños emprendedores enfrentan el desafío de innovar en sus estrategias y conservar la productividad, las ventas, el contacto con clientes y sus áreas administrativas.
De esta manera, ver oportunidades donde otros ven problemas es una de las claves para sobrellevar este momento. Así lo asegura Sebastián Obregón, emprendedor y asesor de microempresarios, quien dice que “en las mipymes existe un proceso de reinvención o reforzamiento, en la mayoría de los casos en sus modelos de negocio y en la búsqueda de nuevos nichos o segmentos”.
Además, afirma que “es el momento de revisar cada proceso, ajustar tuercas y prepararse para la recuperación económica. Esto puede traducirse en proyectar nuevos clientes, abandonar una zona que considerábamos estable y asumir retos, buscar nuevas tecnologías o productos hacia otro tipo de demandas, etcétera”.
En ese sentido no son pocas las tendencias que han tomado relevancia en el sector empresarial con el fin de asumir los cambios ocasionados por el coronavirus. A continuación, las más populares:
El teletrabajo: laborar desde casa se convirtió para muchas empresas, en la mejor manera de continuar en el mercado. Esta tendencia tiene fuerza en aquellas que ofrecen productos y servicios desarrollados para el mundo digital. La autonomía de los colaboradores, el cumplimiento de metas más que de horarios y el equilibrio entre el ámbito personal y laboral son fundamentales para el éxito de esta modalidad.
Marketing digital: los canales de contacto con potenciales consumidores a través de la web ha hecho que muchas empresas se tomen más en serio ventanas como las redes sociales. Fidelizar clientes, personalizar el servicio y buscar la satisfacción del público objetivo a través de tácticas efectivas son la apuesta que pequeñas, medianas y grandes empresas están afinando.
Tiendas online: enseñar los productos y los servicios que se ofrecen en diferentes plataformas se ha convertido en una necesidad para las empresas en esta coyuntura. Esto también supone hallar modalidades de pago cómodos y ágiles para los clientes.
Domicilios: llevar un producto hasta la puerta de la casa se convirtió en la mejor forma de seguir vendiendo para aquellas empresas que antes no contaban con esta funcionalidad. Cumpliendo con todas las medidas de seguridad para cuidar la salud de todos y darle tranquilidad a los clientes, muchas empresas ven en esta alternativa un plus que ofrece comodidad y fácil acceso de los consumidores al producto o servicio.
Convenios y fusiones: otra tendencia que toma fuerza es la unión de fuerzas entre empresas cuyos servicios y productos son complementarios. De hecho, algunas organizaciones están haciendo convenios con otras que ofrecen el servicio de mensajería o domicilio para transportar sus productos hasta sus clientes.
Medidas de higiene: aquellas empresas que tienen permiso de continuar con su producción, han adoptado medidas para salvaguardar la salud de sus empleados. Proveen a su equipo de tapabocas, guantes, trajes especiales y desinfectantes, además de establecer protocolos para un desempeño adecuado y seguro.
Horarios flexibles: esta medida está siendo adoptada por aquellas empresas que cuentan con una gran cantidad de empleados en un mismo lugar. Muchas han adoptado dividir el personal para que labore en diferentes horarios, con el fin de no causar aglomeraciones en las plantas de producción.
En conclusión, todas estas tendencias según Sebastián Obregón, deben articularse de manera pertinente para fortalecer el sentido de pertenencia de los empleados con la empresa, lo que puede traducirse en un rendimiento en la productividad para dar un respiro en medio de la crisis.