Economía confinada
Desaceleración del consumo y estilo de vida físico, por un incremento en la virtualidad. Los cierres de fronteras, la recesión mundial y el miedo a salir para evitar exponerse, cambian la dinámica económica, modificando los intercambios comerciales y creando una distancia social en el mundo de los negocios. Esto favorece la compra de productos locales y una desaceleración de la megatendencia conocida como globalización.
En la medida en que la ciudad se convierte en un espacio que inspira miedo y angustia, las personas se refugian en la intimidad del hogar, la tecnologías permite que puedan acceder a información de todo tipo, indagar precios, ordenar bienes y servicios a domicilio; la recreación y cultura entre muchas otras posibilidades, se crea así una cultura domiciliaria.Lo digital cobra más relevancia permitiendo que se coordinen trabajos a distancia, el marketing da un giro a la virtualidad y a pesar de las afectaciones económicas, surgen nuevas oportunidades, para adaptarnos a una vida en confinamiento.